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martes, 1 de julio de 2008

El número mágico: 100

Antes que nada quiero disculparme, debí haber escrito esta entrada hace mucho tiempo, pero la rutina diaria y, debo confesar que también la flojera, me habían impedido escribir apropiadamente a pesar de que esta entrada la comencé a escribir hace más de dos semanas. Lo siento. Ya estoy de vuelta.

Quería comenzar con una pregunta. Se ha vuelto costumbre en mis entradas:

¿Cuándo los correazos pasan de ser muchos para conventirse en demasiados? Para nadie es un secreto que tenía un castigo acumulado de varios meses y eso no puede traer nunca nada bueno. Era de esperarse que el primer castigo fuese memorable ¡Y vaya que lo fue!

Siempre vi el número 100 como un número mítico cuando se refería a azotes de cualquier tipo. En especial si ese número se refería a correazos. Y con esto no digo que 100 azotes con la vara no sean impactantes, de sólo pensarlo me espanto pues ese es un nivel de masoquismo que desconozco, pero porque simplemente la correa es el instrumento más "temible" que Rafa a usado en mí. Aunque sigo insistiendo que el cepillo es, por mucho, el más detestable hasta ahora.

Pero ¿qué pasa cuando te ordenan: "Vas a contar 100, y aumentarán 10 por cada vez que metas la mano"? Pasa que la fuerza de voluntad es mayor a la que uno cree que tiene. 110 azotes... no está nada mal para la primera vez que paso los 100 correazos. Claro, estuve cerca de 72 horas haciendo esfuerzos para disimular el dolor cada vez que me sentaba e intentando moverme lo menos posible porque cada vez que lo hacía el dolor hacía estragos en mi pobre (pero feliz) cola.

No dudo que haya personas a las que les parezca excesivo mi castigo, spankees que jamás dejarían que un castigo fuese tan lejos, así como otras que les parecerá que 100 correazos es algo normal dentro de sus castigos. Pero en mi caso debo decir que el castigo fue justo como debía ser. No sólo me merecía un castigo severo, sino que después de tanto tiempo de espera, mi cuerpo lo necesitaba y, más aún, lo pedía. Supongo que también influye que no todos los correazos fueron con la fuerza que Rafa ha ejercido otras veces. Asumo que al menos la mitad fueron dados con una fuerza moderada y Rafa me lo recuerda cada vez que salgo con alguna malcriadez.

De más está decir que esos 110 correazos fueron precedidos por una cantidad incontable de nalgadas y por un periodo indefinido en una de las peores rutinas del castigo: El Rincón; que además tenía una misión definida en esta ocasión: acabar con la campaña del Sindicato Latinoamericano de Spankees "Sí a las Nalgadas, No al Rincón". Para los que no entienden a qué me refiero, en el grupo de yahoo Azotes y Nalgadas, un grupo de spankees comenzamos un Sindicato, conocido como el SLS con el fin de apoyarnos ante la autoridad de nuestros spankers y una de nuestros principales enfoques es hacerle entender a nuestros maravillosos spankers que la mayoría de las spankees odiamos el rincón.

El caso es que mientras estaba en el rincón, desnuda y con las nalgas rojas y calientes después de haber recibido una buena tanda de nalgadas, a Rafa se le ocurrió la brillante idea de tomarme una foto con su celular, el cual tiene una muy buena resolución para ser una cámara incluída en un teléfono. Yo no me di cuenta sino hasta después, cuando me mostró la foto y me amenazó con subirla al grupo para desmoralizar al resto de las spankees. "¿Qué dirían tus amigas del SLS si te vieran en el rincón desnuda y con las nalgas rojas?" me preguntaba con una sonrisa burlesca en su rostro. Prendió una de las computadoras de la oficina y me hizo abrir la página principal del grupo. Mientras lo hacía, comenzó a azotarme con un instrumento que no pude determinar de qué material estaba hecho, creo que de plástico, pero a los pocos golpes se rompió; de ahí en adelante usó la correa. Cabe destacar que esos correazos fueron previos al castigo de los 100 correazos, así que técnicamente fueron más de 110, sólo que éstos no los conté porque estaba muy ocupada pensando en por qué las páginas se tardaban tanto en cargar.

Al principio pensé que no se atrevería a hacerlo, pero había puesto tanta insistencia en que tenía que aprender que mi deber era hacer lo que él me ordenara, y que si él me ordenaba irme al rincón, debía hacerlo sin rechistar, que para el momento en que finalmente se cargó la página del grupo, estaba convencida y resignada a ver mi foto en el grupo. Sin embargo, era sólo un juego mental y lo que buscaba era atormentarme. Finalmente no envió la foto. Días después le pedí que me prestara su celular para ver si la foto seguía ahí, pero ya la había eliminado. Gracias a Dios...

Después de apagar la computadora me llevó de la oreja al cuarto contiguo, el que se ha convertido en el cuarto de los correazos, y el resto es historia. De más está decir que llevaba meses soñando con ese momento y realmente me preocupaba que no fuese tan severo como lo necesitaba, pero sin duda el castigo me satisfizo en todos los sentidos (menos el tiempo en el rincón, obviamente).

Es irónico cómo los límites van cambiado y se van ensanchando. Si hace 11 meses me hubiesen dicho que iba a recibir más de 100 azotes con una correa, probablemente hubiese salido corriendo. De hecho, el día de mi primer castigo recibí sólamente 28 correazos y tengo que decir que la sensación de mis nalgas después del castigo y los días siguientes fue muy parecida a la sensación de este castigo. Se lo comenté a Rafa y él me recordó que la intensidad y fuerza que usó en los 110 azotes que me dio, no son comparables a las usadas en aquel primer castigo que fue tan memorable que es la razón principal por la cual hoy estoy escribiendo este post.

Ya superé la barrera de los 100 correazos, y lo disfruté. ¿Qué otros límites me quedan por superar en esta nueva etapa? Sólo el tiempo lo dirá.

9 comentarios:

Anónimo dijo...

Felicidades Amiga por tu número mítico.. la verdad uno piensa que es excesivo. pero al corroborarlo notas que no.. que es como el comienzo.. felicidades y que sigas disfrutando

Camaleon72 dijo...

Guauuuuu exelente querida Alejandra... felicitaciones, meha encantado por fin leer tu castigo y tus sensaciones post castigo...
Solamente una recomendación o consejo, o pensamiento... tomalo como prefieras ok...
Nunca te marques límites... no creo que sea buena idea llegar a cumplirlos... llegar al límite, simplemente te dejará sin ganas de probar más ... jejejeje
llegar al placer y guardarse un poco... quiza sea lo más recomendable...
El Spank es como el Amor... hay que alimentarlo día a día.
Besos y que siga la buena suerte.
Con cariño
Mauri

alespankee dijo...

Muchas gracias Caroll, sin duda voy a seguir disfrutando de este reencuentro con Rafa, gracias por tu apoyo.

Mauri, me alegro que te haya gustado y entiendo tu consejo. Pero yo creo que para una spankee, e imagino que para un spanker es igual se crea un límites mentales hacia ciertas cosas que la misma dinámica de la relación va derrumbando. Pero para mí, el superar un límite no implica dejar el interés de probar más, sino un recordatorio de que el placer se puede conseguir en las situaciones que uno menos se imagina.

Además, nos permite abrir la mente a un montón de experiencias que, por miedo o por prejuicios, hemos descartado sin darles la oportunidad de demostrar lo satisfactorias que pueden llegar a ser.

De todas maneras muchas gracias por tus consejos que sé que son siempre con la mejor intención. Un besote.

Anónimo dijo...

Ale; Felicidades por haber cruzado el límite...

Ahora supongo que para que experimentes con la caña es solo cuestión de tiempo. Te aseguro que no hay mejor deleite para el spanker ni peor tortura para nosotras las spankee's que la práctica del "caning"...

Acercate un momento!.. Shhhh. (Pienso lo mismo con respecto a lo del rincón... Ufa! - Pero que no me escuche mi Amito porque sino voy a tener una larga charla con la esquina de mi cuarto).

Un abrazo... Me encanta leerte.

Clara.

inner_turbulence{SAL} dijo...

Hola Alejandra!

Felices 100 ;o)

Superar uno de estos límites siempre nos deja más felices, plenas y realizadas. Me alegro de que este primer castigo haya sido pasado tan bien. Cuidado al sentarte! ;o)

Y ahora a seguir explorando. La vara es muy bonita, no te la pierdas. Y el rincon tiene su encanto... (y si no se lo encuentras, pues bueno, el peor error es comentárselo a Rafa jaja).

Un beso!
inner_turbulence{}

Anónimo dijo...

Un saludo grande por aqui, Alejandra... que bueno que llegaras a ese punto de verdad que es muy buen nivel para spankee lo digo por experiencia ademas que te lleva a la larga a experimentar nuevas fantasias.

Un abrazo y pasa por mi blog
Besos

Anónimo dijo...

Como dijo inner_ en nuestro foro, los límites nunca son inamovibles. Lo que hoy te parece excesivo quízás mañana te parezca poco o tal vez tenga que ver con la intensidad. Hoy 100 parecen "lo justo" ... en un futuro querrás 500, pero solo son números.
Lo que vale es lo que te hace feliz.

Sir Williams ;)

Anónimo dijo...

Yo lo máximo que he llegado a contar son 20, jaja se me olvida contar además me abureee, pero dudo haber llegado a los 100 correazos, nalgadas puede que sí o más, pero yo tengo un fetiche con los cinturones XDD así que es mi instrumento favorito, el que más detesto hasta ahora es una especie de látigo pequeño con varias correas :S Arde bastante y te deja como una cebra jaja, pero es momentáneo, al otro día estas como si nada y yo que pensaba que después de esa no me levantaba... pero si :D las rayitas desaparecieron y el ardor también, ah por cierto; me uno a tu lucha contra el rincón, es de lo mas aburiiido, lo detesto :S pero como dice inner_ es un error decírselo a tu spanker :D


gatinha {W}

alespankee dijo...

Jajajajajaja bueno C@t, a mí no se me olvida contar porque si se me olvida es capaz de que me dice que tengo que comenzar de nuevo.

Yo tampoco pensé jamás que iba a aguantar 100 correazos, pero tengo que confesar que fue maravilloso, en especial porque después de tanto tiempo lo necesitaba. Necesitaba una paliza que me dejara incapacitada para sentarme, y lamentablemente, con el tiemo nos hacemos más resistentes y ya es dificil que aparezca un hematoma o que te duela al día siguiente.

Cambiando al tema... bienvenida a la lucha contra el rincón... la verdad el lema es "SÍ A LAS NALGADAS, NO AL RINCÓN" Y es la bandera del SLS: Sindicato Latinoamericano de Spankees que surgió como iniciativa de varias spankees en el grupo de yahoo nalgadas_y_azotes. Si quieres unirte también al sindicato eres bienvenenida.

Somos expertas en conseguir excusas para que nuestros spankers nos castiguen jajajajaja ;) Un beso y espero encontrarte pronto.